1/24/2011
Mendigos modernos
6:27 PM
angel monegro
“Para cerveza”, “para vino”, “para whisky”, “para resaca”, rezan los ya gastados letreros de cartón. Pese al frío y al ajetreo, mucha gente se detiene y sonríe. “Al menos somos sinceros”, les dice José Manuel. Y enseguida agrega: “¿Qué tal una moneda por haberles alegrado el día?”. Pocos se resisten a dejarles alguna limosna, delante del cartel de su elección.
“Muchas gracias”, dice educadamente José Manuel, para luego añadir algo que a más de uno deja perplejo: “Visiten nuestra página web”. Suena a broma, pero él y su compañero tienen, efectivamente, un sitio en internet: www.lazybeggers.com. Allí, se autodenominan “los vagos vagabundos” y hablan de su vida en la calle. “Sé vago, sé feliz, sé tú”, su lema.
Pero la página —en inglés, español y alemán— no les sirve sólo de bitácora virtual: gracias a ella además se les puede ingresar dinero en una cuenta, “de forma segura”, a través del sistema PayPal. Es algo así como limosna electrónica. “Somos mendigos del siglo XXI”, explica José Manuel.
Sin embargo, confiesa que ganan más con el método tradicional. “En cinco años habremos obtenido en la web unos mil euros”, calcula Lyndon.
Vagabundos por voluntad
Pero no sólo el uso de internet los distingue de los demás “sin techo”, ya que, a diferencia de éstos, Lyndon y José Manuel viven en la calle no por necesidad, sino por propia voluntad.
Lyndon Owen es informático. Este galés de 37 años ganaba más que bien trabajando en su profesión en Londres, donde llegó a comprarse un apartamento. Pero se hartó del estrés. “Un día cogí mi mochila, cerré la puerta y me largué”, cuenta.
José Manuel Calvo es técnico en energía solar, tiene 55 años y nació en las Islas Canarias. “En Tenerife trabajaba para una empresa que instalaba paneles solares y facturaba 600 mil euros al año. Tenía ocho empleados a mi cargo”, relata. “Pero el trabajo no me dejaba disfrutar de la vida, no era feliz”. Así que un día decidió dejar atrás a su mujer y a sus dos hijos y comenzó a recorrer España. Hasta que se cruzó con Lyndon.
Con todo, vivir en la calle no deja de ser duro, dice Lyndon. Sobre todo en invierno. “Pero cuando miro a mi alrededor, somos más felices que muchas de las personas que dicen tener una vida acomodada”, dice.
1/22/2011
1/18/2011
Facebook Hasta en la Sopa
8:14 PM
angel monegro
A menudo pensamos que muy respetados, los periódicos nacionales de gran tirada, como The Washington Post, se encuentran entre las instituciones más influyentes en el país. Con esto en mente, el esfuerzo desesperado del Post a tejerse con Facebook es una indicación impresionante del poder de Facebook en la sociedad estadounidense. O, al menos, el Post de Washington de la percepción del poder de Facebook.